lunes, 1 de abril de 2013

Saludo a abril





Hoy hace veinte años que murió en Pamplona Juan de Borbón y Battenberg, tercer hijo de Alfonso XIII. Quiso ser enterrado en El Escorial y fueron los agustinos los encargados de recibir el cadáver y depositarlo en el pudridero hasta que  sea trasladado a la Cripta, donde están depositados los restos de los reyes de las Casas de Austria y de Borbón y sus consortes con descendencia, con la excepción  de Felipe V, que reposa en La Granja de San Ildefonso, y de Fernando VI, depositado en la madrileña iglesia de Santa Bárbara. Sólo quedan dos sarcófagos disponibles en ese recinto de mármol gris, que serán el penúltimo y último de los veintisiete existentes. El último ya está reservado para  Mercedes de Borbón-Dos Sicilias. Nunca he entendido la razón por la que los padres del actual monarca  puedan ocupar la Cripta Real, de la misma manera que nunca comprendí la razón por la que a Juan de Borbón se le hiciera en su día un funeral con honores de jefe del Estado. Alguien debería explicarlo de forma entendible. En el Real Sitio de San Lorenzo de El Escorial ni están todos los que son ni son todos los que están. Pero, vamos, no me pilla de sorpresa. En este país a cualquier cosa le llaman mantón de Manila. Y uno, que con los años empieza a conocer el percal, se da cuenta de que las pompas y vanidades de este mundo se disipan, como se disipa el olor del agua de colonia “Álvarez Gómez”,  cuando un  cura de abultada andorga solfea el responso gregoriano “Libera me domine” al borde de la cama del enfermo terminal. También estos días, concretamente el próximo 30 de abril, hará veinte años de la muerte en Méjico de doña Lola Rivas, la mujer que tantas madrugadas estrelladas contempló en las cercanías de El Escorial de Arriba acompañando a su marido, que tenía una “querencia” arraigada con aquel entorno. Cuando se despeje el vaho de lo inmediato, comprenderemos muchas cosas de “El jardín de los frailes”: “En túmulos de escarlata / corta lutos el silencio. Es el ocaso”.

No hay comentarios: