viernes, 9 de septiembre de 2016

Sobre una calle dedicada a Millán Astray









Leo con atención el artículo de Juan Chicharro,  “Perplejidad ante una manifestación de ‘militares’” en República.com. Pues bien, el general Chicharro hace referencia a la convocatoria de una manifestación de veteranos de las FAS que discurrirá el próximo día 24 de septiembre por diversas calles madrileñas en protesta por el cambio de la calle que la Capital de España dedica al que fuera fundador (junto a Yagüe, Franco, Sanjurjo y Mola) del Tercio de Extranjeros en 1919. Un año más tarde, el 20 de septiembre de 1920 se alistaba el primer voluntario Marcelo Villeval Gaitán, de Ceuta. Por méritos de guerra llegó a brigada y resultó muerto en la ocupación del monte Malmusi el 23 de septiembre de 1925 tras el desembarco de Alhucemas. Y el primer legionario enganchado en la península al Tercio fue Aníbal Calero Pérez, en el Banderín de Enganche de Albacete. Muy pronto le seguirían 200 voluntarios catalanes. El general coruñés, tuerto, cojo y manco, José Millán Astray, que antaño respondía al nombre de Pepito, fue mismo militar que el Día de la Raza (12 de octubre de 1936) se enfrentó en Salamanca a Miguel de Unamuno en el paraninfo de la Universidad de Salamanca al grito de ¡muera la inteligencia! en presencia de Carmen Polo, del obispo Plá y Deniel y del gobernador civil. Millán Astray atacó violentamente a Cataluña y a las provincias vascas, describiéndolas como “cánceres en el cuerpo de la nación”. “El fascismo, que es el sanador de España -dijo-, sabrá como exterminarlas, cortando en la carne viva, como un decidido cirujano libre de falsos sentimentalismos”. También se trata del mismo ciudadano que descubrió en la noche de bodas que su mujer, Elvira, había hecho voto de castidad de por vida. Su padre estuvo implicado en el famoso crimen de la calle de Fuencarral. Sería absuelto finalmente, pero suspendido de empleo y sueldo durante un año. Su hermana Pilar cultivó la literatura y fue autora, junto a  Carlos Arniches, de la pieza teatral “La tonta del bote”. Su verdadero nombre fue el de José Millán Terreros hasta que unió los dos apellidos de su padre. En Marruecos ascendió de capitan a general por méritos de guerra. En una entrevista que Millán Astray concedió a Manuel Martínez de la Riva, del diario ABC, el 15 de marzo de 1925, el entonces coronel le cuenta cómo aconteció su mutilación. Dice así:

“Pues yo iba en auto, acompañado del glorioso Topete, en dirección al Fondak, y a la altura de Tanites, nos encontramos con fuerzas de la columna del coronel Góngora, que sostenía fuego con él enemigo. Echamos pie a tierra, y a campo traviesa -no encontramos caballos-, nos dirigimos al encuentro del coronel para prestarle ayuda, si fuese necesaria. De pronto, y cuando descansábamos de una carrera desenfrenada, nos encontramos entre una guerrilla formada por soldados del regimiento de Burgos. Yo unos días antes había arengado a estos soldados, que me hicieron un recibimiento entusiasta en su posición, y creí que al encontrármelos en el campo de combate debía nuevamente arengarlos. Me adelanto. Y en él momento en que con el brazo en alto gritaba "¡Soldados de Burgos—!", sonó la descarga…, cayó el pobre Topete para no levantarse más, caí yo con el brazo atravesado. Lo que vino después será para mi inolvidable. La guerrilla, despreciando el peligro, se puso en pie y rodeándome y cubriéndome con sus cuerpos, me retiró del campo. Los soldados de Burgos tienen un lugar preferente en mi corazón”.

Aquella fue su tercera mutilación. La primera reprodujo el 17 de septiembre de 1921 en el barranco de Almadí dispuesto a tomar Mador. Allí fue herido en el pecho. La segunda, el 10 de enero de 1922 tras el combate de  Draa-el Asef. Al ser relevado por  el teniente coronel González Tablas fue herido en una pierna. La tercera es la descrita por él al periodista de ABC. Hubo otra herida posterior, la cuarta, acontecida el 4 de marzo de 1926 en la toma de Loma Redonda mientras examinaba los puestos de fortificación. Recibió un disparo en la cara que le interesó el ojo derecho, el maxilar y la mejilla izquierda. En 1941, siendo jefe de Prensa y Propaganda, conoce durante una partida de bridge a Rita Gasset, hija de Rafael Gasset, antiguo ministro de Fomento, y prima de José Ortega. Cuando ésta queda embarazada, decide separarse de su esposa Elvira y marchar a Lisboa ante el temor de Franco de que se produjera un escándalo; allí nació, el 23 de enero de 1942, su hija Peregrina. Murió en Madrid el 1 de enero de 1954. A mi entender, lo que pretende la alcaldesa Carmena con el cambio de nombre de calle en Madrid está relacionado con la Ley de la Memoria Histórica, actualmente en vigor. En otro párrafo de su escrito, el general Chicharro atribuye a don Quijote la frase “cosas veredes, amigo Sancho...” Que yo sepa, no existe tal frase en todo el libro salida de la pluma de Cervantes. Esa frase se remonta al romancero derivado del Cantar de Mío Cid, cuando Rodrigo Díaz de Vivar le dice a Alfonso VI, cuando le propone al guerrero conquistar Cuenca: “Muchos males han venido por los reyes que se ausentan...” y el monarca le replica: “Cosas tenedes, Cid, que farán fablar las piedras”.

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